la respuesta que he venido a buscar,
temo llegar y encontrar la nada.
Tengo la canción marcada en mi cabeza
una y otra vez pienso en ella,
apuesto por la equivocación.
Es ella,quiero ser ella,
aquella de carne y hueso
que se clava en el recuerdo.
Desencajé una pieza del rompecabezas
y desde el escalón ruedan cerezas,
se arruga el espacio entre sus cejas.
Encontré un doble-fondo
destapé un falso-techo
cambiaré la llave por un beso.
Lo prohibido deja una estela,
como un sabueso persigue su olor,
nadie debe ser preso del amor.
El compuesto de su nombre
como pecado no da a conocer,
y el corazón pronto lo esconde.
Segundo,tercer, cuarto movimiento
incluso en otra realidad
dictan como bailarle al viento.
Ser el derribo del techo
de la casa de tu ombligo
y buscar ahí cobijo.
Necesito saber cómo funciona
la pesada maquinaria
que ensambla su cabeza.
Acostumbrado a huir de la realidad
se perdió por el camino
y cumplió mil años buscando su destino.
Hurgando en la memoria
reconoce cual es el rincón
en el que dejó descansando la razón.
No es locura sino olvido
cubierto en un desierto
enterrado del recuerdo.
Quizá un corrosivo
consiga hacer un butrón
y robe la esencia de su ser...
Gracias
Ciudadana del mundo.